El mundo en el que vivo
Era un monstruo. Abandonado por mis seres queridos, alejado de mis seres queridos, un monstruo nacido con una vida así como mi destino natural. Así que oculté mi existencia, me aislé del mundo y pensé que si podía prolongar mi vida un solo día más, sería suficiente. Porque, pasara lo que pasara, creía que era lo mejor que podía hacer.
Hasta que te conocí, claro.
—
"¿Hay alguna diferencia entre los humanos y el ganado?"
Ah,
"Desde ese momento, mi mundo..."
Se había convertido en un lugar tan
